Con frecuencia, ese es el problema de las personas que reciben las posiciones que soñaban, que lograron las metas que se habían propuesto para sus organizaciones o se ganaron los títulos que deseaban. En sus mentes ellos ya llegaron a su destino. Allí se sienten cómodos.
Si quieres seguir creciendo no puedes quedarte en una zona de comodidad. Necesitas hacer del aprendizaje tu objetivo. Aprender, aprender, aprender; siempre aprender. Vivirlo con alegría, con entusiasmo, con intensidad; y buscar el aprendizaje con pasión, con un deseo ardiente de mejorar y crecer.
Si lo haces confirmarás que tendrás siempre energía mental y el entusiasmo para vivir a plenitud tu propia vida.
Dice John C. Maxwell que no te preocupes por buscar a quien te pueda enseñar. Como dijo Platón, "cuando el pupilo está listo, aparecerá el maestro".
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