No cabe duda de que esta experiencia mundial de la pandemia ha venido a cambiar muchas cosas de la civilización a la que pertenecemos. El cambio es bueno. Las experiencias, en principio, no son buenas ni malas. Son de aprendizaje.
Sabiendo aprovecharlas, podemos enfocarnos hacia nuevos rumbos, más promisorios, progresistas, inteligentes, sensibles y humanos. Esta es una gran oportunidad para dejar atrás viejos hábitos, viejas creencias, prácticas nocivas y situaciones que nos denigran como especie.
El futuro, aunque diferente a lo que estamos acostumbrados a vivir, nos produce incertidumbre. Y esto hace que queramos forzar las cosas para regresar al estado que vivíamos anteriormente. Error.
El futuro siempre trae posibilidades de cambiar, de mejorar, de aprender, de superarnos, de mejorar y de dar un nuevo paso para evolucionar conscientemente hacia niveles más elevados y que dignifiquen al ser humano.
Al reflexionar en tu vida pregúntate: ¿Qué costumbres nocivas vale la pena dejar atrás? ¿Qué nuevos hábitos vale la pena cultivar? ¿Qué acciones vale la pena seguir realizando?
¿Que pensamientos te conviene desarrollar? ¿Que situaciones de vida te hacen sentir el orgullo de ser humano y desear contribuir al mejoramiento de nuestra sociedad?
Nuevas actividades surgirán día a día. El dinero se va a seguir utilizando.
La economía, la política, la religión, la ciencia, la educación, el arte, nuestra intimidad, los medios masivos y redes sociales; todo va a seguir estando presente. Habrá cambios, por supuesto. Muchos los promoveremos nosotros mismos; otros los establecerán las organizaciones que existen en nuestros entorno.
Lo importante es que tú busques las cosas que en realidad te beneficien en lo social, en lo material, en lo profesional, en lo físico, lo psicológico, moral y espiritual. La grandeza humana no está en la pobreza de nada. Está en la riqueza de conocimientos, en la sabiduría, en el desarrollo de la inteligencia, la sensibilidad y de conciencia, todo lo cual se manifiesta en lo material, lo económico. lo familiar y lo social. Tú puedes tener, hacer, usar y ser lo que tú quieras.
Tienes ante ti, un futuro lleno de oportunidades. Aprovéchalas en tu beneficio y en el de tus semejantes.
